Yo quisiera YA ser un reeeeeeeeeeey! (si, si, es la melodia del Rey leon).

En los tiempos que corren por fin todas las consolas de última generación tienen acceso a internet como algo común, abriendo la posibilidad de mandarse mensajes, conectarse con amigos y bajarse cualquier boludes a través de este medio a tu consola favorita (o si vivís en un primer mundo, tenes 2 o 3 de ellas, malditos afortunados). Con esta función incorporada vienen los queridos servicios exclusivos de cada consola con la posibilidad de bajarse juegos que obviamente son chiquitos en tamaño y capacidades pero altos en adicción y nivel artístico (porque por algún lado tiene que pegar, no?). Por supuesto, al ser económicos de realizar estos juegos cualquier estudio por boludo y pequeño que sea se prende a hacer algún jueguito y convierte a estos servicio en una desbordante caja de pandora. Esto provoca que salga cada mierda que ni en pedo uno daría un peso por ellas pero al mismo tiempo nacen cosas innovadoras, creativas y entretenidas que en algunos casos valen más que comprarse un juego de 50 dólares de manera convencional para la consola en cuestión.

Ya habiendo planteado el preámbulo, entro a hablar del juego en cuestión que nos concierne esta nota: “Final fantasy crystal chronicles: My life as a King” (mas largo no lo podrían haber hecho el titulo este…).


Como todos ya estarán consientes la serie que una vez fue única en su tipo con números romanos hace rato que ha dejado de ser única y ha lanzado spin-offs y nuevas series de universos paralelos para todas las consolas posibles hasta el hartazgo mismo. Pues la serie Crystal Chronicles fue la que le toco a los usuarios de Nintendo, la cual siempre se centro en la jugabilidad multijugador… que justamente en este juego no se encuentra nada de eso XD.
El juego en realidad se trata de un simulador y management de ciudades y ciudadanos en donde uno construye la ciudad, ordena a sus soldados a donde ir a explorar y pelear, compra las nuevas actualizaciones de las tiendas y habla con la gente para que no se deprima por vivir en un fuerte del cual no puede salir ya que esta todo cubierto de monstruos horribles que se comen a sus hijos. Y no hay peleas, uno solo ve planillas y elige donde poner los edificios y cada día uno ve como progresa su reino… honestamente en papel esto suena TAN aburrido que no puedo creer que lo haya bajado siendo uno de los mas caros del servicio de descarga y que lo haya ganado en alrededor de 30 horas de juego. Sin embargo, aunque nadie lo crea, es terriblemente adictivo y enviciante, aunque parezca poco lo que uno hace, te dan ganas de seguir esperando a ver qué pasa cada día que pasa y lo que tenes que hacer al próximo y así ver como progresa el juego hasta que lo ganas. Es increíble realmente como te termina atrapando y no lo podes parar de jugar.
También hay que mencionar un par de cosas más: Primero, que mientras vas avanzando se va desarrollando una historia que no es muy interesante pero funciona lo suficiente como para mantenerte en el hilo de la situación. Segundo, que el juego se puede expandir bajando contenido extra que por supuesto hay que pagar aunque con el paquete inicial uno ya se entretiene más que suficiente, además siempre huele a curro berreta lo del contenido extra. Y ultimo, el juego se ve bastante bien para venir por este servicio miniaturas.

Resumiendo, aunque no suene entretenido este juego realmente lo es y por supuesto lo recomiendo. Me he divertido mucho construyendo el reino y mandando a pelear a mis soldaditos que siempre ligaban muchas palizas (Que divertido es verlos volver todos bajoneados XD).

Para finalizar, este no es el único juego que tengo del servicio wiiware, también me baje el “Defend your castle” (Muy adictivo pero te destruye los brazos y muñecas) y el “LIT” (Esta buenísimo y te lo comes enseguida) de los cuales en algún día hablare de ellos.

Espero que hayan disfrutado lo leído y si no, lo lamento mucho simplemente estaba al pedo en el laburo en un día que no tengo que hacer una mierda según parece y me puse a escribir estas pelotudeces que tenía ganas de hablar para pasar el tiempo. Chao!